Hoy no pienso en el libro

Y es raro, pues no me extrañaría que la mayoría del tiempo monopolizase las conversaciones hablando de él. Recuerdo que cuando comencé a escribir aún estuve unos meses guardándolo en secreto, resultó difícil no dejarse llevar por la ilusión y fue justo después de terminar el ensayo Trigonometría del amor cuando finalmente hice ademán de mostrárselo en privado a mi pequeño círculo. Por lo general la gente se sorprende de que escriba, no entiendo el porqué si al fin y al cabo todos lo hacemos cada día. Sucede que uno se plantea el estereotipo de escritor como si éste tuviese que ser por necesidad un Arturo Perez Reverte de pacotilla, ataviado con pasmina y gafas pequeñas, adoptando en todo momento una fingida pose de intelectual tal que la fotografía de contraportada con cara de interesante. Buena muestra de ello es el Celebrities de Perez Reverte, que ha sido sin duda el que más me ha gustado de la tercera temporada de Muchachada nui; lo vi cuatro o cinco veces seguidas y luego fui haciendo skip para repetir los mejores momentos. Loor a los muchachos.



Me he desviado del tema otra vez; todo esto viene porque la semana anterior me quedé con las ganas de subir el video. Hoy tengo bastante trabajo así que no puedo dedicarle mucho más tiempo a este post.

Dejo constancia del estado actual de la novela:

A poco más de 50 páginas del final (voy por las 218 corregidas) ya sólo me quedan alrededor de catorce capítulos por revisar y habré terminado. También he recibido ya las cartulinas color oro y cuero que había pedido para hacer los puntos de libro que llevarán el sello y el título inscrito. Todavía no he ido a buscar el hilo de Sisal, supongo que lo encontraré en la ferretería.

Y como último apunte decir también que dentro de dos semanas mi novia y yo adoptaremos a otra gata que se va a llamar Roxy.

No todo va a ser escribir.

K.M.Koffer http://www.klauszayin.com/